48 Cuentos breves 

Y me decía.

Enviado por felixlibrisermo  

Algunos días, mi madre me agarraba de los hombros, sus uñas hundiéndose suavemente en mi ropa. Ella me miraba con anhelo y orgullo reflejándose en su ojos, como si fuera lo mejor que le hubiera pasado en su vida aunque cada vez que alzara la voz dijera lo contrario.

Ella se acercaba aún más, recuerdo, la tensión intensificándose y solidando el espacio como si de paredes de concreto se trataran, entonces mi madre movería sus brazos alrededor mi cuello, encerrándolo igual que una serpiente e inhalando fuerte, me decía sin falta casi como un susurro, por un momento pensando en imaginarlo quizás fuera así,

Ella susurraba: "Te mereces el mundo, hija mía, el mundo por el que cada ser humano pasa." En ese momento no sabía a qué se refería, parpadeando en confusión y haciendo una mueca, intentando alejarme cuando el aire empezó a faltarme.

Pero ahora que sostengo a la criatura entre mis brazos, sollozando por el dolor y el ardor en mi cuerpo, un líquido corriendo y el chillido de la criatura punzando en mis oídos, no pude evitar actuar de la misma manera, no pude detenerme.

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¿Cuánto amor?

Enviado por livan23l  

Viajó un chico desde los rincones más escondidos para visitar al sabio más instruido, le vio a los ojos y con inquietud persistente preguntó al viejo:
-Señor... ¿Cuánto amor hay que tener por una persona para volverse loco?
-Siento decepcionarte chico, pues ningún cuerdo haría esa pregunta.

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CON TRISTEZA

Con tristeza, el camaleón se dio cuenta que para conocer su verdadero color, tendría que posarse en el vacío.

Autor del

cuento

: Alejandro Jodorowsky

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cuento 001

Enviado por jportillo2020  

habia una ves un n iño que fue con sus padres a la playa
pero los sorprendio una tormenta
que mal dia para salir a pasear
regresamos trsites a casa
pero nuestro papa nos dijo que iriamos la proxima semana
entonces yo espere y espero pero elñ tiempo nunca pasaba
cada 1 minuto miraba el reloj y nunca avanzaba
entonces el gran dia llego
y fuimos a pasear muy felices


El Fin.....

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la princesa de fuego

Enviado por dach2901  

Hubo una vez una princesa increíblemente rica, bella y sabia. Cansada de pretendientes falsos que se acercaban a ella para conseguir sus riquezas, hizo publicar que se casaría con quien le llevase el regalo más valioso, tierno y sincero a la vez. El palacio se llenó de flores y regalos de todos los tipos y colores, de cartas de amor incomparables y de poetas enamorados. Y entre todos aquellos regalos magníficos, descubrió una piedra; una simple y sucia piedra. Intrigada, hizo llamar a quien se la había regalado. A pesar de su curiosidad, mostró estar muy ofendida cuando apareció el joven, y este se explicó diciendo:

- Esa piedra representa lo más valioso que os puedo regalar, princesa: es mi corazón. Y también es sincera, porque aún no es vuestro y es duro como una piedra. Sólo cuando se llene de amor se ablandará y será más tierno que ningún otro.

El joven se marchó tranquilamente, dejando a la princesa sorprendida y atrapada. Quedó tan enamorada que llevaba consigo la piedra a todas partes, y durante meses llenó al joven de regalos y atenciones, pero su corazón seguía siendo duro como la piedra en sus manos. Desanimada, terminó por arrojar la piedra al fuego; al momento vio cómo se deshacía la arena, y de aquella piedra tosca surgía una bella figura de oro. Entonces comprendió que ella misma tendría que ser como el fuego, y transformar cuanto tocaba separando lo inútil de lo importante.

Durante los meses siguientes, la princesa se propuso cambiar en el reino, y como con la piedra, dedicó su vida, su sabiduría y sus riquezas a separar lo inútil de lo importante. Acabó con el lujo, las joyas y los excesos, y las gentes del país tuvieron comida y libros. Cuantos trataban con la princesa salían encantados por su carácter y cercanía, y su sola prensencia transmitía tal calor humano y pasión por cuanto hacía, que comenzaron a llamarla cariñosamente "La princesa de fuego".
Y como con la piedra, su fuego deshizo la dura corteza del corazón del joven, que tal y como había prometido, resultó ser tan tierno y justo que hizo feliz a la princesa hasta el fin de sus días

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Silencio

Enviado por gabl  

Silencio.
(No lo tomo como cuento mas bien una reflexión)

Mi mente es un caos, no logra ordenar ideas, ni coordinar pensamientos. Ando deambulando sin sentido, errante entre palabras inconclusas que no forman alguna oración o frase, que me permita escribir una línea que le diga a tus ojos la pena que consume mis días.
Estoy perdido en al abecedario como niño deletreando sus primeras sílabas.
La escritura como expresión de mi dolor angustioso no fluye como la tinta de la pluma del poeta. Queda en el aire la inspiración que motiva a plasmar sobre el papel la prosa alegre o llena de nostalgia.
Pero mi mano temblorosa no obedece a los impulsos que le ordena mi yo interior a trazar rasgos que expresen lo que mi voz calla. Hay silencio en mis manos, en mi mente nublada.
Pensativo elevo mi vista al firmamento, al azul infinito manchado de escasas y pálidas nubes que semejan ovejas en pastoreo.
El cielo es cómplice de la incapacidad mental que atormenta la razón e impide que la palabra escrita se manifieste oralmente o que sea el eco del sonido que el corazón emite sin ser escuchado.
¡Cuánto silencio hay en mí alrededor!
gbl
07/04/2017
Derechos Reservados de Autor.

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DISCUSIÓN

Dos monjes tenían una discusión a la orilla del río. El maestro, que en ese momento pasaba, se acercó a ellos y les preguntó sobre que se trataba su debate. "Estábamos mirado aquél árbol, y dije que las hojas se movían, pero mi compañero dice que es el viento el que se mueve", dijo uno de los monjes.
El maestro miró al árbol, luego a sus discípulos y les dijo, "es su mente la que se mueve".

Autor del

cuento

: Cuento tradicional budista zen

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PERCHERO

Odiaba al perchero: de él todavía colgaban la bufanda y el sombrero que ella no quiso llevarse. De vez en cuando lo abrazaba.

Autor del

cuento

: Mirco Ferri

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ENCUENTROS

Él nunca decía cuándo iba a volver. Ella no sabía a qué hora preparar el corazón.

Autor del

cuento

: Rosa Salgado Suárez

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UN MILAGRO

Le habían asegurado que la Sagrada Imagen retornaría el movimiento al brazo paralizado y la señora tenía mucha fe. ¡Lo que consigue la fe! La señora entró temblando en la misteriosa cueva y fue tan intensa su emoción que enmudeció para siempre. Del brazo no curó porque era incurable.

Autor del

cuento

: Llorenç Villalonga

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