LA SONRISA DE DIOS
18 Mayo 2019, 23:59
La pregunta de mi pequeño hermano me sorprendió:¿quien es Dios?
Lo espontanea de su pregunta y la expresión de su carita inocente,me hablaban de su primera inquietud infantil.
Ven-le dije-siéntate en mis rodillas.
¿porqué me haces esta pregunta?
¡verás!-me contestó-anoche escuché a mamá hablando sola en la oscuridad de su habitación;hablaba con un "señor"que ella llamaba Dios;entré despacito en la habitación...pero allí no había nadie,nada más que mamá;por la mañana le pregunté que quien era el,y porqué ella hablaba enfadada y llorando con ese tal Dios,pero no quiso responderme
¿tu sabes quien es,hermano?
¡Si! -le respondí- y entonces vi como su cara se iluminaba de alegría
pero ahora me preguntó:¿porqué te has puesto triste cuando te he hablado de el?
verás-le respondí-cuando papá enfermó gravemente,le pedimos fervientemente que le salvara-tu no habías nacido todavía-¡pero no nos escuchó! y papá murió.
¡¡ah! exclamó el pequeño,ese Dios es un medico malo ¿no?
¡No!-le dije- mira las estrellas y la luna,el Sol,los arboles,las flores,nosotros mismos...todo lo ha hecho Dios,con su poder y bondad todo lo creó.
La sorpresa del niño no tuvo limites:¿todo eso lo ha hecho Dios?
¡Si! -le respondí-
¿Entonces,si es bueno...¿porqué no salvó a papá?¿porqué lo dejó morir?
Papa no ha muerto,está con El en el cielo-acerte a contestar-
¿entonces mamá,porque sigue enfadada con El?
Queríamos mucho a papá y ella sufrió mucho cuando el se lo llevó;cegados por el dolor prometimos que nunca te hablaríamos a ti,de El.
Pero hoy he comprendido lo equivocados que estábamos,y tu has ayudado a ello,pues me he dado cuenta que a Dios no se le puede ocultar;El está dentro de ti,te ha utilizado amorosamente para hacérnoslo comprender.
Unos pasos detrás nuestro hizo volver nuestras caras...¡mamá!
ella con lagrimas en los ojos dijo ¡os he escuchado!
Y sin más,nos abrazamos los tres,y rezamos como nunca,pidiéndole perdón a Dios,a la vez que enseñábamos las oraciones al pequeño.
Una última pregunta hermano,-pidió- ¿cual es?-le respondí-
¿como es Dios? ¿no lo puedo ver? ¡si que lo puedes ver!
Mírate a ti mismo y sin duda lo verás -le dije emocionado-
Una estrella fugaz cruzó el cielo en la noche...
¡Dios había sonreído!
AUTOR YEDRA.