EL LEÓN MARINO Y EL PINGÜINO
Estaba un león marino en el polo norte estirado tranquilamente en un trozo de hielo, cuando de repente un pingüino se sentó a su lado.
- ¿Pero qué haces incauto? - dijo el león - ¿no ves que te puedo comer?
- Se me ha quedado el móvil sin batería - replicó el pingüino, sin ni siquiera levantar la cabeza -.
Moraleja: Presta atención a tu alrededor, tus pequeños problemas no son nada comparados con el mundo.
Autor de la fábula: Dani Alcalà
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